






Cham
La experiencia de la conducción cambia radicalmente al introducirse el concepto del self-driving. Este método, que hace prescindible
la existencia de un conductor, hace posible el desplazamiento autónomo de algunos colectivos que antes se veían privados, como por ejemplo los invidentes.
Además, para estos se abre la posibilidad de conocer el mundo a partir de muestras táctiles que se los presentan en el trayecto.
Gracias a estas, son capaces de apreciar aquello que los rodea con todo lujo de detalles y realismo mediante texturas y la transición entre estas.
Cham es un servicio público de transporte para personas invidentes. Para disfrutar de este transporte el usuario se tiene que registrar en el Ayuntamiento y seguir una pequeña guía práctica que se muestra a continuación.
Al usuario se le proporciona un mando que activará cuando quiera disfrutar del servicio. Una vez activado, el vehículo se aproximará hasta él. El individuo detectará que esta cerca por señales acústicas. Como se aprecia en los prototipos, Cham esta diseñado por una superficie táctil lineal que le indica por donde se tiene que introducir en el vehículo. Una vez dentro, se comunicará con Cham a través del comando de voz y la pantalla táctil de superficies que se dispone a lo largo de la parte frontal